Mundoteveo: Salzburgo, Austria.

Salzburg, Austria

1 de junio de 2013

Estamos en el hotel Schaider en la localidad de Ainring, Alemania. Este lugar está en el límite con Austria, muy cerca de Salzburgo. De esta forma podemos ahorrar unos euros ya que los hoteles de Salzburgo son bastante más caros. En este caso, nos hospedamos en una habitación cuádruple, pero es un hotel 3 estrellas, eso significa que hay algunas cositas (detalles que ayudan) mejores.

Hoy también está nublado. La novedad es que no llueve…aún. Sin perder más tiempo, nos vamos a Salzburgo.

Estacionamos debajo de una montaña…aunque el estacionamiento es tan grande que quizás también llegue hasta debajo de la plaza. Para el caso, estamos en Karajan Platz. El nombre se lo debe a uno de los directores de orquesta más reconocidos a nivel mundial del siglo XX que esta ciudad supo dar al mundo. Pero la estatua, pertenece a Leopoldo, arzobispo de Salzburgo durante algunos años del siglo XVIII.

Karajan Platz

Nos dirigimos a la oficina de turismo, en busca de un mapa porque la ciudad es muy grande. Por ser sábado nos encontramos con el mercado a pleno en la Universitätsplatz. La verdad, es que me sigue sorprendiendo la variedad de cosas (muchos tipos de alimentos) que se ofrecen en este tipo de mercados. Pareciera ser (todavía no me he atrevido a compran nada) que son productos frescos y que se pueden comprar con tranquilidad.

Edificio de la de. Univertä;, al fondo la Kollegienkirche

Si bien, ya había visto bombones de Mozart en el supermercado…hoy presenciaremos la “explotación de la imagen” en estado puro. Seguramente saben, que en esta ciudad Amadeus nació. Y claro, al principio no le dieron tanta importancia al niño genio, haciendo que su familia se trasladara a Viena para poder mostrar ese talento a los Habsburgo…y de eso hablamos cuando anduvimos por Viena. No quiero que esto suene a reproche. Como dije antes, la gente tiene que vivir de algo…o de alguien (que ya no está pero que su legado sigue siendo fuente de inspiración). El turismo es parte de esto y si está bien contado…mejor.

Uno de los puestos del mercado.

En la Universitätsplatz, encontramos a nuestra derecha la Universität, abierta en 1622 (aunque tuvo algún cierre en el transcurso de los años), comenzó siendo benedictina y hoy es estatal.

Kollegienkirche

La Iglesia contigua es la Kollegienkirche (es la iglesia de la Universität).

Continuamos nuestro camino, y llegamos a una plaza con una fuente bastante linda. Notamos que algunos negocios aquí llevan un par de siglos abiertos…Como el Café Tomaselli.

Plaza

El café Tomaselli, abierto desde 1703.

También encontramos un termómetro y barómetro y sismógrafo bastante lindo…que nos advierte de la humedad del 99%... lo cual nos da la pauta que esta situación de “sequedad” no durará mucho. ¡Pero mejor ni la nombro! No sea cosa que aparezca más rápido.

El termómetro de la ciudad

Muy cerca de allí, nos encontramos con la Residenzplatz (Plaza de la Residencia) donde vemos la Residenzbrunnen (La Fuente de la Residencia). Desde aquí, vemos el Dom (La catedral de Salzburgo) y también Die Residenz, que es una galería de arte.

Dom

Residenzbrunnen

Die Residenz

Llegamos a Mozartplatz, donde la estatua del compositor adorna el centro. Ahí está la oficina de turismo. Con el mapa en la mano, ahora nos ubicamos un poco mejor.

Mozartplatz

Estamos en la Domplatz, con otra fuente preciosa. En este Dom, terminado en el siglo XVII fue bautizado Mozart. También este edificio, fue víctima de la Segunda Guerra Mundial y su reconstrucción terminó en 1959.

Dom y la fuente de María

Interior del Dom, un techo.

Salimos de la Catedral y vemos a Kapitelplatz donde encontramos un ajedrez gigante y también un monumento bastante extraño: una bola dorada con un muñeco arriba. No sé qué es.

Kapitelplatz

Pero además de este llamativo monumento, hay otra fuente: La fuente de Neptuno.

La fuente de Neptuno, Kapitelplatz

Desde aquí, se aprecia la fortaleza sobre la montaña donde iremos más tarde. Según el mapa, estamos cerca de St Petersfriedhof (el cementerio de la Abadía San Pedro). Pero antes de llegar, un aroma embriagador nos lleva de las narices para quedarnos inmóviles ante un molino… El olor a pan recién horneado es irresistible… Compré 2 piezas de pan para compartir entre nosotros, era una delicia.

El molino de la panadería

Una pieza de pan.

Ahora sí, entramos al Cementerio de la Abadía San Pedro, donde para mí sorpresa, está en actividad…es decir, hay cruces que son bastante recientes. También, hay una pequeña capilla, donde se emite un documental sobre monjas (pero no entendí, porque hablaban en alemán sin subtítulos ni nada).

Capilla en el cementerio San Pedro

Interior de la Capilla

También, tenemos la posibilidad de visitar las catacumbas (hay que pagar), pero preferimos no entrar. Lo que sí, es muy linda la Stift St Peter (La Abadía San Pedro). Aquí van algunas fotos de su interior. Anduve mirando algunos datos…y creo poder decirles que esta Abadía data de los siglos VIII o IX. Lo que pasa es que el edificio (o algunas ruinas) ya existían desde la época del Imperio Romano…pero después cambió de manos y se le fueron practicando reformas. Me resulta muy difícil precisar fechas. Entre otros datos interesantes, Mozart también estuvo por aquí, componiendo misas y tocando el órgano, en compañía de su esposa Constanze.

Las catacumbas

Abadía San Pedro

Interior de la Abadía San Pedro

No nos queda más que ir a ver la Fortaleza Medieval a pie. Hay un funicular, pero no vale la pena. Es mejor disfrutar de la vista…sobre todo cuando no llueve.

Vista de Salzburgo, mientras subimos a la fortaleza.

Yo esperaba ver un castillo (como a los que estaba acostumbrada visitar) pero en realidad es todo un pueblo amurallado. Data del siglo XI, y fue residencia de los príncipes obispos. Dentro, vemos la capilla San George.

San George

Interior de San George

Entre las salas que me llamaron la atención, se encuentra el Golden Hall donde se dan conciertos en la actualidad. Anteriormente, eran las habitaciones del arzobispo.

Golden Hall

Otra cosa curiosa, es un afiche que muestra al ejército austríaco en la zona de Tirol. En principio, habla de la 1° Guerra Mundial, donde Austria perdió lo que se conoce como Tirol del sur a las manos de Italia hasta nuestros días.

Cuadro sobre la Primera Guerra Mundial

Ahora pasamos al museo, donde se exhiben varios objetos de diferentes tiempos. Lo morboso es la sala de tortura…vemos objetos de tortura de la Edad Media. Otra particularidad, que me llama la atención es la cocina, está bastante completa…además de estar ubicada junto a la sala de torturas…interesante disposición.

Elementos de tortura de la Edad Media

La cocina medieval

Hace un rato…comenzó a llover nuevamente. ¿Qué puedo decir? Todavía podemos dar unas vueltas por la fortaleza, sin embargo ya no creo que mejore el clima.

Entre cosas novedosas, encontramos un museo de marionetas. Vamos a dar una vuelta por allí. Hay una marioneta del arzobispo Wolf Dietrich, responsable de reformas urbanas importantes en la ciudad de Salzburgo. Por la marioneta que es…se ve que no fue muy popular.

En la exposición de marionetas

Marioneta de arzobispo Wolf Dietrich

Sin otra cosa que enfrentar a la lluvia, bajamos otra vez a la ciudad. Como ya es hora de almorzar, mejor entremos a un restaurant, total el agua nos espera.

Después de un rico almuerzo y barato: 50 euros (que incluyeron 4 platos principales, bebidas y un postre…porque pedí una ensalada con pollo para “hacer lugar”) continuamos con el recorrido que nos invita a seguir el mapa.

La copa Dinamarca...y yo.

Hallamos la fuente de “Papageno”, personaje de la Flauta Mágica, de la ópera de Mozart.

Papageno

Nuestro camino nos acerca a una peatonal con los carteles de los negocios cargados de elegancia y medioevo. En medio de todo eso, vemos el Antiguo Rathaus (Ayuntamiento).

Los letreros de los negocios

Altes Rathaus

Cruzamos la ciudad, y tenemos una vista del río Salzach. Es muy bonito.

Salzach

Ahora estamos frente a un museo de Mozart, es una casa donde vivió.

Casa donde vivió Mozart (Mozart-Wohnhaus)

Desde allí, nos dirigimos al Schloss Mirabell cuya función original fue la de acoger a la amante del arzobispo Wolf Dietrich, Salomé Alt y a sus 15 hijos en el año 1606. En ese tiempo, el nombre del castillo era Altenau y cuando el arzobispo falleció, le cambiaron el nombre a Mirabell. Nosotros pasearemos por los jardines.

Schloss Mirabell

La fuente del Pegaso es la principal.

Fuente de Pegaso

Salimos de los jardines y pasamos a una plaza, hay un monumento muy particular. Conmemora a más de las 250 víctimas de Salzburgo, a manos de los nazis en 1941.

Monumento a las víctimas del nazismo

Cerca de allí, hay otra iglesia. Se llama St Andrä, no está en el itinerario turístico…pero igual sacamos fotos y acá está.

St Andrä

Quizás, sea un momento para las “curiosidades”. Durante nuestro camino, entre la plaza y la iglesia nos encontramos con un personaje muy curioso: un nazi. Esta persona caminaba por la vereda de enfrente, con un paso casi marcial y cada tanto extendía la mano y gritaba: ¡Hi…H…! La gente, que estaba en el lugar, lo observaba como extrañada…mientras que nosotros lo mirábamos con la boca abierta. Este personaje, siguió caminando y nosotros nos detuvimos en la iglesia St Andrä… Yo prefiero tratarlos de “locos”…porque me da miedo tratarlos de “convencidos”.

Nuestro mapa nos lleva a Loretokirche, construida entre los años 1633 y 1637. También fue un convento.

Loretokirche

La próxima iglesia, se llama Sebastianskirche. Esta iglesia tiene una historia larga de construcciones y reconstrucciones por diferentes motivos… desde destrucción total, hasta incendios. En principio, se construyó entre los años 1505 y 1512. A causa del deterioro, en 1750 se tiró abajo y construyó nuevamente. En 1818, un incendio provocó serios daños en el techo (principalmente). Su renovación comenzó en 1820. La última restauración que se hizo fue en 1991 y se completó en 1996.

Sebastianskirche

Se cuenta, en otro blog, que en el cementerio de esta iglesia, descansan personajes famosos. Entre ellos, el arzobispo Dietrich y la esposa de Mozart (junto con su segundo marido). Yo no contaba con este dato (cuando hicimos la excursión), aunque ya había visto un cementerio en este paseo…y no dan ganas de ver otro. (Igualmente, dejo la dirección del otro blog más abajo para los que quieran investigar un poco más.)

Continua lloviendo, pero…por si nos falta agua, tenemos unas fuentes al mismo nivel del suelo…que coronan el día dedicado a uno de los cuatro elementos.

El agua...¡qué linda!

Todavía nos faltan lugares por visitar, por ejemplo: la casa donde nació Mozart. También es otro museo… ¿Pero no estuvimos ya en la casa de Mozart? Sí, estuvimos…pero en esta casa nació, que no es lo mismo. Las mudanzas frecuentes, ya constituían una característica de la familia del músico y hoy yo lo considero como una inversión. Porque Salzburgo vive de todo eso… A veces, fantaseo con algunas cosas. Entre ellas, me gustaría conceder la posibilidad de que algunas personas vivieran 300 años. Me hubiera gustado que Mozart hubiera vivido un poco más…aunque fue famoso y reconocido en vida por su obra; después de fallecido se convirtió en grandioso…se hizo dulce, se hizo bombón, postal, disco de platino… Capaz que si seguía vivo no le reconocían tanto éxito (vieron eso que tienen los artistas…hacen cosas mientras viven y pocos le dan pelota, hasta que un día se mueren y nos damos cuenta que eran unos genios). Me gustaría que el tipo sepa toda la gente que vive de él…y se lo agradecieran.