martes, 8 de octubre de 2013

Colmar, Francia.


Colmar

21 de septiembre de 2013

Y como Estrellita es precavida, tenía unas zapatillas en el auto para cambiarse y devolverse el buen humor.  Y me agradezco doblemente, ya que la Villa de Colmar en Francia, también tiene muchas calles adoquinadas.

Entre Freiburg y Colmar, hay una hora en auto, aproximadamente.  Y si bien, no teníamos muchos datos de esta villa, nos guiamos por la belleza de las fotos en internet. Creo que este viaje, es uno en los que me arrepiento de no haber investigado un poco más antes de ir…

Rápidamente, nos dirigimos a la oficina de Turismo que permanece abierta (es sábado y a veces es extraño que las oficinas de turismo estén abiertas) hasta las 18 horas.


Nuestra primera foto, nos cuenta de la Place de la Mairie. Así como vi en Saint Raphael, en Cannes y claro, en París también, hay un hermoso carrusel.  Y una fuente de forma piramidal.

Place de la Mairie

Place de la Mairie
Con el mapa en la mano, decidimos realizar uno de los circuitos que propone. Nuestro primer punto para observar es “La casa de las cabezas”. Construida en 1609 para un comerciante del lugar. Su nombre se debe a que en la fachada se cuentan 106 cabezas y máscaras en total. Y encima de todo, se ubica la escultura de un tonelero ya que la casa comenzó a utilizarse como un lugar para comerciar vinos. Esta escultura fue esculpida por Bartholdi…

La casa de las cabezas.
Continuamos nuestro camino por Rue des Boulangers y luego Rue des Serruriers para llegar a la Iglesia de los Dominicanos. Su construcción se inició en 1283 y culminó a mediados del siglo XIV.

Iglesia de los Dominicanos.

Iglesia de los Dominicanos.
En la plaza de los dominicanos también vemos un aljibe.

aljibe
La segunda iglesia que vemos es la Colegiata San Martin. Construida entre 1235 y 1365. Durante la última restauración en 1982, se encontraron cimientos de otra iglesia que data del año 1000. Si bien los habitantes de Colmar la consideran catedral, en realidad sólo lo fue durante 10 años.

Colegiata San Martin

Colegiata San Martín
La villa de Colmar, tiene distritos o barrios muy pequeños diferenciados por oficios que se dieron lugar aquí. Nos encontramos en Grand Rue y a partir de aquí, si seguimos por la derecha, iremos al “Barrio de los curtidores” y si nos decidimos por la izquierda, encontraremos más puntos turísticos.  Les recuerdo que, hay más de una opción de recorrido.

a partir de acá, a la derecha es el barrio de los curtidores.
Nosotros, nos fuimos caminando por la izquierda. El edificio que ahora vemos es el Koifhus. Se construyó entre 1433 y 1480. Después se agregaron dos edificios más en el siglo XVI. Es el edificio público más antiguo de Colmar. Desde el comienzo, se le dio una doble función. En la planta baja, era un depósito y el lugar para cobrar impuestos por exportación e importación de bienes. Y en el primer piso, era para reuniones de los diputados de la federación correspondientes a las diez ciudades imperiales de Alsacia, creada en 1534.

Koifhus
Con la revolución…se abolieron los privilegios comerciales y el edificio se utilizó para otros fines. En 1840 una compañía teatral ocupó el edificio. Luego en 1848 el primera oficina bancaria se mudó allí. Entre 1870 y 1930, la Cámara de Comercio funcionó. Hoy en día, muchas actividades públicas tienen lugar aquí.

Otra placa que llama la atención se ubica en la casa que está pegada al Koifhus. En esta casa nació el General Jean Rapp el 27 de abril de 1771 (tiene una avenida en su nombre, también un monumento en el campo de Marte de la Villa), que acompañó a Napoleón en la guerra de la revolución francesa y las guerras napoleónicas.

Casa donde nació el gral Rapp
Cruzamos el Koifhus y vemos la fuente Schwendi realizada por… Auguste Bartholdi en 1898, inspirado en los relatos de este diplomático y militar del siglo XVI y que luego se dedicó a la vinicultura.

Fuente Schwendi
Nuestro camino nos lleva al distrito de los curtidores. Construido entre los siglos XVII Y XVIII y cuenta el cartelito que, las pieles eran secadas en los pisos superiores de las viviendas… que lindo olorcito habría por allí…

Distrito de los curtidores
Muy cerca de ahí, se encuentra el Mercado cubierto. Abierto en 1865, tiene a un lado un  canal que les permitía a los comerciantes traer sus mercaderías en pequeños botes.

Mercado cubierto
En frente, se halla el “Distrito de los pescadores”. Obviamente, ¿qué había acá? Sí, pescadores.

Distrito de los pescadores
Ahora, mientras mi familia compra un salamín riquísimo en Chez Thierry (les dejo la página web), yo le saco foto al Museo de ciencias naturales.

comprando Salamines

 
Museo de ciencia naturales.

Estamos ante “La Pequeña Venecia”. ¿Otra más? Yo me pregunto, ¿se puede vivir prendido de las fama de otra ciudad?...parece que se puede. No es la primera vez que leo o escucho que a una ciudad se la apoda como “pequeña Venecia”. Basta muchachos... ¿no hay otra cosa que puedan mostrar?

La pequeña Venecia.
Les cuento que “La pequeña Venecia” es la foto central del mapa de Colmar. No es poca cosa. Ni Rapp, ni las iglesias, ni ningún otra cosa, o coso, es más popular que este paisaje… ¿será así?

Gente de mi patria…no entubemos  las zanjas… ¡hagámoslas más anchas! ¡Hagamos nosotros también nuestra “pequeña Venecia”!  ¡No a las rutas, sí a los canales! Es mi nuevo lema.

Dejemos a Venecia en paz. Y les muestro la fuente Roesselman, otro héroe de la ciudad, esculpida por Auguste Bartholdi en 1898.  Llevada por los alemanes en 1943, y restaurada (y devuelta) en 1945. … ¡Otra vez Bartholdi! Mmm.

Fuente Roesselman
Encontramos una casa de estilo veneciano. Se llama La casa de los caballeros de San Juan. Construida en 1608 pero, se aclara en el sitio de turismo, que esta casa nunca perteneció a los juanistas.  Y no habría razón para llamarla así. Pero no vamos a hacer escándalo si una casa se llama así o “asá”… Aunque ya que están le hubieran puesto “Casa veneciana…a dos cuadras de La Pequeña Venecia” haga 2 x 1, venga a Colmar y termine en Venecia.

Casa de los caballeros de San Juan.
Fuimos a cenar a “La Romántica” un restaurante italiano sobre la  Grand Rue.  Ya casi, el relato llega a su fin…pero el destino no quiso que yo terminara tan fácil. 

Una postal de Colmar
Tomamos la  autopista A 35 dirección norte. De pronto…una imagen familiar ocupa el centro de la rotonda… Sin embargo, me niego a creer que ella esté acá. Saco fotos apresurada (la calidad es malísima y me disculpo por eso, pero estaba desprevenida) y confirmo lo que acabo de ver: La estatua de la Libertad…en Colmar.

¿Eh? ¿Pero estamos todos locos? ¿No era que había dos Estatuas de la Libertad? ¿Crucé un portal cósmico? ¿Habré estado en Venecia de verdad?… ¡Cuántas incógnitas!

La estatua de la libertad en Colmar
¿Se dan cuenta por qué hay que leer? Bueno, resulta que si hubiéramos elegido otro recorrido, tal vez, hubiéramos pasado por la estatua en honor a Auguste Bartholdi…realizador de la tan famosa Estatua de la Libertad.  Y pensar que pasé por el museo Barthodi y no saqué fotos porque no se me ocurrió que fuera TAN famoso.

La estatua de la libertad en Colmar.
Gente de Colmar… gente de la oficina de turismo de Colmar, déjense de joder con “La Pequeña Venecia” y cambien la portada por la famosa estatua que, a más de uno le llamaría la atención al ver a la señora y cosas referidas a su creador en un lugar que ciertamente no es el que nos imaginamos casi todos.

Y ahora sí, me voy con 2 datos… casi chimentos.

La estatua, inspirada en un proyecto abandonado de iluminar el Egipto Medio, a la entrada del Canal de Suez, fue ofrecido en la amistad de Francia a los Estados Unidos y se inauguró en 1886. Para su realización, Bartholdi fue ayudado por la oficina de investigación de Gustave Eiffel y el ingeniero Maurice Koechlin.” Según mis interpretaciones (que son exclusivas) le regalaron a USA, algo que otro no quería…

2° La estatua que vimos en la rotonda, tiene 12 metros de alto y es una réplica de la original con motivo de conmemorar el centésimo aniversario de la muerte de Bartholdi. También a partir de 1986, se ha firmado como símbolo de amistad la hermandad entre las ciudades de Colmar y la Ciudad Universitaria de Princeton.

Ahora sí…nos vamos. Y les dejo el link de la oficina de turismo porque es mejor leer antes y no perderse de nada.


 

 

 

 

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